Entre la coyuntura, el futuro: energías renovables
.
Por equipo del Observatorio UNR (*)
.
I’m not a big believer in man-made climate change
.
Mientras el mundo todavía procesa y asimila la sorpresa de Donald Trump como nuevo presidente de los EEUU, los diarios del mundo comienzan a preguntarse cuál será la suerte del Acuerdo de París contra el cambio climático, ratificado el 4 de noviembre de este año, la semana previa a las elecciones norteamericanas.
Es que, a lo largo de su historia, el candidato electo, ha manifestado abiertamente su intención de no ratificar el compromiso por parte de los EEUU, en caso de ser elegido en el máximo cargo ejecutivo. De tal magnitud han llegado a ser sus declaraciones, que el 20 de septiembre de este año, 376 miembros de la Academia Nacional de Ciencias de ese país, de los cuales 30 han sido laureados con el premio Nobel; publicaron una carta abierta para advertir cuales son las consecuencias de no adherir al Acuerdo de París, y como respuesta a las declaraciones de Trump.
.
.
Para no dejar dudas, el tercer párrafo de la carta abierta firmada por el grupo Responsible Scientist, afirma: “Durante la campaña presidencial primaria, se afirmó que la Tierra no se está calentando, o que el calentamiento se debe a causas puramente naturales fuera del control humano. Tales afirmaciones son inconsistentes con la realidad.”
Como puede observarse en el gráfico siguiente, la tendencia de los últimos 50 años de emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera se muestra permanentemente en aumento. Esto se explica, no solo por el aumento población (de hecho, el gráfico no toma ese efecto) sino también por la intensidad en el uso de energía, y la incorporación relativamente reciente, de fuentes de energía basadas en carbón; principalmente promovidas por países de la esfera Asia-Pacífico, especialmente China.
.
.
En ese sentido, la promoción e implementación de energías renovables dentro de la matriz energética de los países, es una de las soluciones parciales que se están ejecutando para paliar el problema del cambio climático. Sin embargo, como se podrá observar en nuestro informe, estas medidas resultan insuficientes.
.
.
Es que, las aristas que plantea el problema son enormes. Primero, hay consenso en la comunidad científica de que el calentamiento global accionado por el hombre es efectivamente un problema. Sin embargo, todavía las conclusiones son resistidas por diversos sectores, quienes argumentan -por el contrario- que no se está ante la presencia de un problema, sino de un mito o una exageración.
En relación a lo anterior, la reducción de emisiones de CO2 mediante el cumplimiento de objetivos, tienen consecuencias en las economías de los países en el corto plazo, que pueden llegar a traducirse en un menor ritmo de crecimiento económico. En otras palabras, la solución de largo plazo se vuelve en un desincentivo en el corto plazo para cualquier oficialismo que quiera mantenerse en el poder, sea de la ideología que sea.
Desde esta perspectiva, el Acuerdo de París (como así también, el Protocolo de Kyoto) surgen como soluciones institucionales que, entre otros objetivos, contribuyen disminuir ese desincentivo, al convertir la política de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en una política de estado compartida. Pero lo anterior, conduce a un nuevo problema: la coordinación.
.
.
En efecto, la tentación por parte de un país de comportarse como free-raider (polizonte) es alta: acumula los beneficios climáticos derivados de la reducción de CO2 de otros países, mientras incrementa su nivel de actividad, basado en energías contaminantes (pero menos costosas en términos contables). El problema de coordinación surge, porque ningún país se encuentra exento de generar esta conjetura, y actuar en consecuencia. Asimismo, ni en uno ni en otro tratado, se ha reglamentado un andamiaje que permite sancionar a los países firmantes por no cumplir los objetivos. Así, hasta el momento todo queda librado al compromiso y a la voluntad unilateral de las partes.
Habiendo planteado las dificultades del escenario actual, los invitamos a leer nuestro informe sobre energías renovables. A diferencia de este artículo, el trabajo no aborda problemas políticos coyunturales, sino que brinda un estado de situación del sector y de su potencialidad.
Así, en la primera sección, se detallan los avances de estas fuentes a nivel mundial y los motivos de su crecimiento; mostrando cuales son las fuentes de generación más utilizadas a nivel mundial, qué recursos se necesitan para aprovecharlas y cuáles han sido las políticas utilizadas para impulsar las energías renovables, y como se justifican desde la teoría económica. Por otra parte, en la segunda sección, se explica el estado actual del sector en Argentina, los condicionantes que limitaron su crecimiento en las últimas décadas y sus perspectivas de desarrollo futuro.
¡Que lo disfruten!
(*) Integrantes:
Luciano Jara Musuruana, Germán Tessmer y Patricio Almeida Gentile
.
.